
Campos electromagnéticos y biología celular:
Nuevos descubrimientos de la biofísica
Introducción: del misticismo a la ciencia
Durante décadas, la investigación de los fenómenos bioelectromagnéticos tuvo que enfrentarse al estigma del misticismo. Desde Franz Anton Mesmer y su "cura magnética" hasta la pseudociencia moderna, el campo siguió siendo susceptible de charlatanería. Al mismo tiempo, sin embargo, se desarrolló un debate científico bien fundado, sobre todo en relación con el efecto de los campos electromagnéticos débiles en los sistemas biológicos. Hoy existen pruebas experimentales suficientes de que estos campos pueden desencadenar efectos fisiológicos, aunque su nivel de energía sea apenas superior al ruido térmico.
Principios biofísicos: cómo afectan los campos electromagnéticos a las células
A diferencia de las radiaciones ionizantes, los campos electromagnéticos (CEM) no afectan a las células aportándoles energía, sino modificando los campos eléctricos propios del organismo. Estos campos existen en todos los niveles de la jerarquía biológica, desde las moléculas hasta el organismo. La atención se centra especialmente en la membrana celular, que forma una doble capa eléctrica que actúa como condensador.
El campo eléctrico en la membrana celular
La membrana tiene una conductividad eléctrica extremadamente baja y una resistencia elevada, lo que la convierte en un importante lugar de interacción electromagnética. Los potenciales transmembrana, normalmente en el rango de 10-100 mV, conducen a intensidades de campo eléctrico de hasta 10⁷ V/m. Estos potenciales pueden verse influidos por la superposición de campos EM externos, lo que modifica las corrientes iónicas y los procesos celulares.
Posibles mecanismos del efecto de campo
El efecto de los campos EM débiles es complejo y no puede explicarse por un único mecanismo. Actualmente se barajan varias hipótesis:
- Modificación de las proteínas de membrana
- Cambio en la distribución de iones
- Transformaciones de fase en los lípidos de la membrana
- Efectos cooperativos y resonancia
Rangos de frecuencia y aplicaciones terapéuticas
En la práctica, los campos EM se utilizan principalmente en la región ELF y SLF (16-60 Hz) o como campos de alta frecuencia (por ejemplo, 27 MHz, 450 MHz), a menudo combinados con modulación de baja frecuencia (PEMF). Sin embargo, los análisis científicos demuestran que estas aplicaciones tienen en su mayoría una base técnica, no biofísicamente optimizada. Modelos teóricos como los de Tsong o Markin sugieren frecuencias de resonancia en el rango de 10³-10⁷ Hz, un rango que apenas se ha utilizado en la práctica hasta la fecha.
La vía de acción: de la célula al organismo
El efecto de los campos electromagnéticos suele producirse en varias etapas:
- Interacción física con las moléculas
- Reacción biológica, como la alteración del flujo de iones
- Amplificación sistémica a través, por ejemplo, de las cascadas de señalización del calcio
El ión calcio (Ca²⁺) en particular se considera un "mensajero secundario" central que puede modularse a través de los CEM, con consecuencias fisiológicas de gran alcance.
Conclusión: potencial y preguntas sin respuesta
La investigación demuestra claramente que incluso los campos EM débiles pueden influir en los sistemas biológicos. Sin embargo, los mecanismos subyacentes aún no se comprenden del todo. Muchas aplicaciones médicas no se basan en conceptos de frecuencia optimizados, sino en condiciones técnicas. Por ello, los autores piden que las futuras terapias se ajusten más a los descubrimientos biofísicos, en particular mediante una selección selectiva de los rangos de frecuencia.